OCEANÍA/PAPÚA NUEVA GUINEA - El catequista mártir Peter To Rot será el primer Santo de Papúa Nueva Guinea

lunes, 31 marzo 2025

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - El Papa Francisco ha aprobado los votos favorables de la Sesión Ordinaria de los Padres Cardenales y Obispos miembros del Dicasterio para la canonización del catequista y mártir Peter To Rot, que pronto será proclamado primer Santo de Papúa Nueva Guinea. La fecha se decidirá durante el Consistorio (aún sin fecha) que el Papa había anunciado hace un mes mientras estaba hospitalizado en el Hospital Gemelli por una neumonía bilateral.

Las peticiones y oraciones de la Iglesia de Papúa Nueva Guinea, que hace unos meses, durante el Viaje Apostólico del Papa Francisco a Asia y Oceanía, pidió al Pontífice que interviniera en el proceso de canonización del catequista y mártir (véase Fides 6/9/2024), han sido atendidas.

Nacido en Rakunai en 1912, Peter pertenecía a la comunidad Tolai que vive en la parte más oriental de la isla. No sabemos el día exacto de su nacimiento y bautismo porque los documentos fueron confiscados por la policía japonesa durante la Segunda Guerra Mundial. Lo que sí sabemos con certeza es que creció en el seno de una familia numerosa y que ha sido educado principalmente por su padre, que era jefe de aldea. Tras recibir la Primera Comunión, presumiblemente entre 1922 y 1926, movido por una profunda devoción a la Eucaristía, ejerció como ministro.

En 1930, empezó a asistir al Colegio Catequista Tarining de San Pablo, en Taluligap, y, tres años más tarde, regresó a su pueblo para desempeñar el ministerio de catequista. También se dedicabao a obras de caridad, pensando especialmente en los pobres, los enfermos y los huérfanos. A los 23 años se casó con Paula La Varpit, con la que tuvo tres hijos.

Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, los japoneses ocuparon Papúa Nueva Guinea y encarcelaron a todos los misioneros, pero en un principio no impidieron la actividad pastoral. Peter To Rot hizo todo lo posible por no abandonar la comunidad cristiana, continuando sus actividades catequéticas y preparando a las parejas para el sacramento del matrimonio.

Cuando los ocupantes le prohibieron proseguir su labor, continuó en secreto con extrema prudencia para no poner en peligro la vida de los fieles, plenamente consciente de que esa elección podría haberle costado la vida.

Durante la ocupación, se opuso a la poligamia que los japoneses habían permitido para congraciarse con las tribus locales, desafiando incluso a su hermano mayor. Éste le denunció a la policía y, por estos motivos, fue detenido en 1945 y condenado a dos meses de prisión. Mientras estuvo en prisión, sólo recibió visitas de su madre y su esposa, junto con sus hijos. Tratado con más severidad que los demás presos, murió en la cárcel en julio de 1945, asesinado por envenenamiento.
Peter To Rot fue beatificado por San Juan Pablo II el 17 de enero de 1995 en Port Moresby, capital de Papúa Nueva Guinea.

El 18 de marzo de 2024, los obispos de Papúa Nueva Guinea y de las Islas Salomón solicitaron la dispensa del milagro en el camino hacia la canonización de Peter To Rot. Al mismo tiempo, si bien señalaron que se habían comunicado muchas pruebas, consideraron que es muy difícil documentar el milagro necesario, tanto por la escasez de hospitales capaces de proporcionar la documentación científicamente necesaria para probar una supuesta curación milagrosa, como por la cultura de la población local, que es esencialmente oral y presenta la dificultad de documentar por escrito cualquier milagro que haya podido ocurrir.

Además, en el estado se hablan hasta 820 dialectos, por lo que sólo un pequeño número de personas es capaz de escribir en un inglés correcto y comprensible. Por estas razones, la petición fue aceptada y el Dicasterio fue autorizado el 22 de marzo de 2024 a emprender el procedimiento especial con dispensa de milagro para la canonización de Peter To Rot.

Se trata de un procedimiento por el que el Papa, tras la debida verificación, aprueba un culto que existe desde hace tiempo, sin esperar al reconocimiento de un milagro. Se diferencia de las beatificaciones y canonizaciones formales, para las que la Iglesia prevé una investigación regular y el respectivo milagro. Además, el Papa siempre puede tomar decisiones especiales. Así lo hizo el Papa Francisco con respecto a Juan XXIII, que se convirtió en santo debido a su fama de santidad, extendida por todo el mundo durante décadas, sin que se le reconociera un segundo milagro. También siguió un procedimiento extraordinario Benedicto XVI con respecto a san Juan Pablo II, cuya Causa de canonización se abrió pocas semanas después de su muerte, sin esperar los cinco años estipulados.

En cuanto a To Rot, tras su beatificación, su fama de santidad y sus signos crecieron considerablemente, extendiéndose a todas las diócesis de Papúa Nueva Guinea y también a las vecinas Islas Salomón y Australia. Se han publicado cientos de escritos sobre él en nombre de Iglesias, instituciones y grupos vinculados a su memoria.

También son muchas las gracias atribuidas a su intercesión, recogidas después de su beatificación, cuando su figura se hizo más conocida. Su fama de santidad y sus signos están ahora muy extendidos y van en aumento.
(F.B.) (Agencia Fides 31/3/2025)


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