Abuja (Agencia Fides) - «Este no es solo un ataque a la Iglesia, sino ante todo una afrenta directa a los valores de justicia, paz y dignidad humana». Así ha calificado Julius Yakubu Kundi, obispo de Kafanchan, el asesinato del padre Sylvester Okechukwu, secuestrado y asesinado en el estado de Kaduna, en el noroeste de Nigeria (véase Fides 6/3/2025).
En una declaración titulada “Justa indignación por el horrible asesinato de mi hijo”, El obispo Kundi express: «Con profundo dolor y justa indignación, condeno en los términos más enérgicos la incesante y trágica ola de secuestros que ha tenido como objetivo a sacerdotes, agentes pastorales y fieles. La diócesis está sobrecogida de angustia y la tierra está llena de rabia. ¿Hasta cuándo nuestros pastores y hermanos serán cazados como presas? ¿Hasta cuándo nuestros lugares de culto se convertirán en fuente de miedo en lugar de santuarios de esperanza?».
El obispo de Kafanchan también recuerda que el asesinato del padre Okechukwu no es un hecho aislado. «No se trata de una tragedia única. Recordamos con dolor el asesinato del catequista Raymond Ya'u el 21 de julio de 2021 en Matyei, el padre Johnmark Cheitnum, secuestrado y asesinado el 14 de julio de 2022 en Yadin Garu, Consejo de Lere (véase Fides 20/7/2022), el seminarista de 25 años Naaman Stephen Ngofe, asesinado en Fadan Kamantan, Consejo de Zangon Kataf, el 7 de septiembre de 2023, y el catequista Istifanus Katunku, secuestrado el 4 de julio de 2024 en Kagal, Consejo de Zangon Kataf, cuya suerte sigue siendo desconocida. Estas atrocidades aumentan nuestro dolor y refuerzan nuestra petición de justicia».
Por último, el obispo Kundi destaca cómo varias comunidades locales de su diócesis viven angustiadas por los continuos secuestros de ciudadanos a manos de bandas criminales que permanecen impunes.
El padre Sylvester Okechukwu, de 44 años, había sido capturado por hombres armados que atacaron la rectoría de la iglesia de Santa María Táchira, donde era párroco, a última hora de la tarde del 4 de marzo. En la mañana del 5 de marzo, un equipo de las fuerzas de seguridad que realizaba una operación de búsqueda halló el cadáver del padre Okechukwu con signos claros de violencia.
La Asociación Cristiana de Nigeria (Christian Association of Nigeria - CAN) en los 19 estados del norte y el Territorio de la Capital Federal (Federal Capital Territory - FCT), que agrupa a las diversas iglesias y comunidades cristianas de Nigeria, también ha expresado sus condolencias por la muerte del padre Okechukwu en un comunicado emitido hoy, 7 de marzo.
«La Northern CAN expresa sus más profundas condolencias a la archidiócesis católica de Kaduna, a la diócesis de Kafanchan, a la familia del padre Okechukwu y a los fieles cristianos que se han visto sumidos en el luto por este doloroso acto durante este periodo de Cuaresma», se lee en el comunicado. «Este atroz crimen pone de relieve una vez más la alarmante inseguridad que reina en nuestra nación, especialmente en el norte de Nigeria, donde ciudadanos inocentes, incluidos miembros del clero, son repetidamente atacados, secuestrados y asesinados con impunidad. No debe permitirse que continúen sin control los incesantes ataques de elementos criminales contra la Iglesia y la sociedad en general».
(L.M.) (Agencia Fides 7/3/2025)