ASIA/PAKISTÁN - En el Año Jubilar, la educación representa la esperanza en Multan

martes, 18 febrero 2025 jubileo  

Multan Diocese - Catholcs Pakistan

Multan (Agencia Fides) – En el sur de Punjab, dentro de la diócesis de Multan, la educación se erige como el gran anhelo y la mayor esperanza para la población católica, especialmente en este Año Jubilar. Así lo explica a la Agencia Fides el padre Jamshed Gill OP, sacerdote dominico y exdirector del Instituto Pastoral de Multan, actualmente Consejero General para Asia-Pacífico en la Orden Dominicana.

En una de las ciudades más grandes de Pakistán, con más de 1,2 millones de habitantes, los católicos superan los 80.000, aunque cerca de la mitad de ellos vive en condiciones de extrema pobreza, ya sea en áreas rurales o en los asentamientos marginales que han proliferado en la periferia urbana.

El pasado enero, la comunidad católica inauguró solemnemente el Año Santo en la catedral de Multan. “Es un Año Jubilar de renovación personal y de fe”, declaró en la ocasión el obispo Yousef Sohan. La presencia de numerosos jóvenes y estudiantes en la celebración puso de relieve una vez más la urgencia de fortalecer el acceso a la educación.

“Para devolver la esperanza a la gente y generar oportunidades de desarrollo, el primer paso es invertir en la educación”, subraya el padre Gill. Sin embargo, señala que, aunque “la diócesis hace todo lo posible por sostener las escuelas católicas tanto en la ciudad como en las aldeas rurales, la escasez de recursos sigue siendo un gran obstáculo”. Los dominicos, por ejemplo, gestionan una escuela y un internado en Bahawalpur, dentro de la diócesis, pero muchas familias no pueden pagar siquiera las cuotas mínimas, lo que impide a sus hijos acceder a la educación.

La situación se complica aún más en los internados de nivel superior, cuyas matrículas son más elevadas y, en su mayoría, solo accesibles para familias de clase media, predominantemente musulmanas. Como resultado, “las familias cristianas más pobres son las más afectadas, atrapadas en un ciclo de pobreza económica y educativa del que no logran salir”, advierte Gill.

Consciente de este desafío, la diócesis de Multan, bajo el liderazgo del obispo Sohan, ha establecido la educación como prioridad en su plan pastoral. Desde que asumió su ministerio hace dos años, el obispo ha reiterado su compromiso de fortalecer el sector educativo, abriendo nuevas escuelas y mejorando las existentes. Actualmente, la diócesis gestiona directamente 27 centros educativos, que brindan formación a miles de niños y jóvenes en zonas urbanas y rurales.
“En este Año del Jubileo, redoblaremos nuestros esfuerzos en el ámbito educativo. La comunidad entera está llamada a contribuir, y los más pobres y marginados recibirán esta iniciativa como un auténtico don del Señor”, concluye.
(PA) (Agencia Fides 18/2/2024)


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